El nuevo Hotel-Spa Aguas de los Mallos, en Murillo de Gállego (Zaragoza), posee instalaciones de referencia basadas en el empleo de fuentes renovables como la geotermia o la solar que minimizan sus consumos e impacto ambiental
Sus instalaciones y sistemas que han convertido a este establecimiento turístico en un destacable ejemplo de eficiencia energética.Este hotel de 4 estrellas y 27 habitaciones ha sido diseñado y construido con criterios de sostenibilidad y mínimo impacto en el privilegiado espacio natural en el que se integra, al pie de los Mallos de Riglos y junto al Río Gállego.
El ahorro y la eficiencia energética están bien presentes en toda la instalación, desde los muros de piedra caliza revestidos de madera de roble que ofrecen un excelente aislamiento térmico hasta el empleo de la domótica y la posibilidad de regular la iluminación y la climatización en función de que las zonas estén en uso o no, pasando por el uso de intercambiadores de calor para optimizar el consumo energético en la climatización del agua caliente sanitaria, la piscina o el spa, la instalación de cristal de bajas emisiones que evita la pérdida de energía a través de las ventanas o la utilización de luces de led y bajo consumo en todo el establecimiento.
El hotel cuenta con instalaciones singulares como la de geotermia, con 32 pozos de 120 metros de profundidad excavados en la misma finca que abastecen de agua a todo el circuito de suelo radiante para la climatización. Esta instalación es, por sus metros totales de perforación y la potencia térmica instalada, una de las más grandes de Aragón y de España. Además el hotel tiene un campo de placas solares que completan el suministro energético.