El registro existente se adapta al nuevo Real Decreto, para que además de edificios de nueva construcción se puedan inscribir inmuebles existentes
La Xunta habilita a partir del jueves el registro para la certificación energética de viviendas, adaptándose así a las exigencias del nuevo Real Decreto del Gobierno central, que hace este trámite obligatorio en los contratos de compra venta o arrendamiento a partir del próximo uno de junio. La administración gallega contaba con un registro de la certificación energética para los edificios de nueva construcción, y la adaptación a este Real Decreto permitirá la inscripción de inmuebles ya existentes.
El Gobierno central estableció en el Real Decreto 235/2013 el procedimiento básico para realizar este proceso: la certificación se conseguirá a través de técnicos competentes externos a la Administración, y deberá acercarse junto con la solicitud oficial al registro dispuesto por la Xunta, tanto de manera telemática a través de la sede electrónica de la Xunta, como presencial. El certificado tendrá una validez de 10 años.
En este documento, y mediante una etiqueta de eficiencia energética, se asigna a cada edificio una determinada clase energética, que variará desde la A para los más eficientes hasta la G para los menos eficientes. La medida persigue cumplir con los compromisos de España con Europa en el horizonte de 2020, que incluyen la mejora de un 20% en la eficiencia energética, y busca además una mayor transparencia en el mercado y una mayor información para los propietarios.