El consejero de Territorio y Sostenibilidad (TES), Santi Vila, ha anunciado esta mañana la próxima aplicación de un impuesto a los bancos, promotores y demás entidades jurídicas que tengan pisos vacíos, con el objetivo de evitar la desocupación permanente de viviendas e incentivar el mercado de alquiler.
El consejero ha recordado que, según el censo elaborado con la colaboración del Colegio de Registradores de Cataluña, hay actualmente unos 80.000 viviendas nuevas vacías y que contando los pisos vacíos usados, la cifra se acerca a los 450.000.
Los principales objetivos del nuevo impuesto son incentivar los propietarios y titulares de viviendas actualmente vacantes para las destinen a alquiler y penalizar su desocupación injustificada, sobre todo cuando se trate de grandes tenedores de viviendas que no se utilizan y que incumplen, así , su función social. Según Vila, es “una medida de estímulo” que quiere también contribuir a reducir el precio del mercado del alquiler.
Se trata de un modelo que ya está vigente en Francia. En este país, el número de pisos vacíos a los que se aplica este impuesto se redujo un 40% entre los años 1999 y 2010, lo que indica la efectividad de la medida a la hora de alquilar estas viviendas.
El consejero de TES ha remarcado que el nuevo impuesto se aplicará a las personas jurídicas-no a los particulares-y será proporcional al número de viviendas vacías de que dispongan. Estarán exentas del impuesto las personas jurídicas situadas en aquellos lugares del territorio donde no haya demanda acreditada de vivienda social.
La voluntad del Gobierno es incorporar ya el nuevo impuesto en el paquete legislativo que acompañará a los Presupuestos de 2013.