El Instituto Europeo del Cobre (ECI), en colaboración con el Instituto Italiano del Cobre (IIR), convoca la 5ª edición del concurso internacional de diseño “El Cobre y la Casa”


Este concurso, cada vez más reconocido internacionalmente y actualmente bajo el patrocinio de ADI (Asociación Italiana del Diseño Industrial), ha obtenido un gran éxito en ediciones anteriores, pasando a triplicar el número de participantes desde 2007 a la actualidad.
El objetivo del concurso es mostrar las infinitas posibilidades que ofrece el cobre de una manera innovadora, estimulante y poco convencional, dirigiéndose a diseñadores y arquitectos profesionales, así como a estudiantes inscritos en escuelas superiores de artes gráficas, decoración, diseño, en facultades de arquitectura y diseño, en doctorados y masters. El concurso está deliberadamente orientado a los jóvenes, por lo que se ha impuesto un límite de edad inferior a los 40 años.
La fecha límite para la recepción de los trabajos es el 30 de septiembre de 2014
Las ediciones anteriores mostraron el entusiasmo creativo y el espíritu innovador de los jóvenes participantes, transformando objetos cotidianos y aparentemente tradicionales mediante nuevos conceptos de diseño. Por tanto, una vez más, el concurso se prepara para recibir cientos de ideas nuevas, curiosas, inusuales y revolucionarias, con lámparas, jarrones, mesas, sillas, radiadores y un largo etcétera, en las que el cobre es el protagonista absoluto, ya sea en estado puro, en aleaciones como el bronce y el latón o junto a otros muchos materiales.
Los proyectos serán examinados por un jurado formado por tres profesionales de la arquitectura y el diseño: el arquitecto Marco Ferreri, el arquitecto y diseñador Roberto Paoli y el arquitecto y crítico de diseño Marco Romanelli.
La edición de 2014 confirma el importante papel cultural de este concurso, que celebra y exhibe las propiedades ornamentales y constructivas del cobre en el sector del diseño. Su excelente conductividad térmica y eléctrica, maleabilidad, resistencia y ductilidad, junto con sus propiedades antimicrobianas y su total e ilimitada reciclabilidad, hacen que el cobre sea cada vez más utilizado, debido a su continua contribución en el campo de la sostenibilidad medioambiental y del ahorro energético.