Se trata de un sistema inteligente basado en una aplicación para smartphones y códigos QR que informa al usuario sobre plazas libres, incidencias y facilita el pago
El Ayuntamiento de Valladolid y el centro tecnológico Cidaut, ubicado en el Parque Tecnológico de Boecillo, han puesto en marcha hoy un sistema pionero a nivel mundial para optimizar el aparcamiento en superficie en el centro de la ciudad. Se trata de un sistema inteligente denominado Blue Parking que se basa en una aplicación para smartphones y códigos QR, y que ofrece información al usuario sobre plazas libres, incidencias del tráfico y facilita el pago desde el móvil a través de plataformas seguras.
El alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva; el concejal de Seguridad y Movilidad, Manuel Sánchez, y el investigador de Cidaut César Domínguez han presentado el proyecto en un acto celebrado hoy en el Consistorio. César Domínguez ha explicado en palabras recogidas por DiCYT el funcionamiento del sistema, que se encuentra en proceso de patente.
“El usuario tiene que darse de alta y el sistema le asignará un código QR que tendrá que imprimir y colocar en una zona visible del vehículo, lo que le servirá para identificarse como usuario entre los controladores. Posteriormente debe descargar la aplicación en su smartphone e ingresar la cantidad de dinero que considere oportuna, con un mínimo de cinco euros, constituyendo un fondo del que se deducirán los gastos derivados de los futuros aparcamientos. Después ya puede localizar las plazas libres en tiempo real y conocer la tarifa y el tiempo máximo que puede permanecer estacionado, aparcar y efectuar el pago correspondiente al tiempo exacto que haya durado el estacionamiento”, detalla, al tiempo que añade que el sistema puede avisar en un plazo determinado del tiempo de estacionamiento que resta y proporcionar informaciones complementarias sobre incidencias del tráfico, aspectos turísticos o comerciales.
Esto proporciona, según el investigador, una serie de beneficios como “el ahorro de dinero y un menor consumo de combustible, al saber dónde hay plazas libres y no dar vueltas por la ciudad; una mayor comodidad de pago, el pago por el tiempo exacto de estacionamiento y una contribución a una menor contaminación”.
Domínguez ha apuntado que la entrada en operación del sistema Blue Parking se produce tras tres pruebas piloto llevadas a cabo en la ciudad por voluntarios del Laboratorio Ciudadano de la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico de Valladolid, lo que ha permitido introducir mejoras sugeridas por los propios usuarios. “Hemos introducido mejoras de operación en el tema de la evanescencia, la información por calles y no por aceras, la información hablada, una versión nocturna para no deslumbrar al usuario y la posibilidad de evitar el GPS en dispositivos Android”.
“Sensor” ciudadano
Por su parte, el alcalde de Valladolid ha destacado el hecho de que el sistema no precisa de sensores. “A diferencia de otras ciudades que llenan las calles de sensores, apostamos por un sistema en el que el “sensor” es el ciudadano, es decir, se produce un flujo de información cruzado sin necesidad de infraestructura de sensorización”. Asimismo, el regidor ha recordado que el nuevo sistema va a pervivir con el sistema tradicional de aparcamiento en zona azul y pago en parquímetros.
En los próximos seis meses el nuevo sistema se desarrollará en una zona prefijada del casco histórico: Las Moreras, Isabel la Católica, San Agustín, Encarnación, San Ignacio, Concepción, Santa Brígida, Doctor Cazalla, San Benito, General Almirante, Francisco Zarandona, Conde Ansúrez, Sandoval, Leopoldo Cano, San Blas, Felipe II, Conde de Ribadeo, León, Gardoqui, Torrecilla, Angustias, Magaña, Solanilla y Antigua. Pasado este tiempo, el objetivo es ampliar el sistema al resto de calles con zona azul de la ciudad.