La Subcomisión de Urbanismo de Barcelona ha aprobado hoy definitivamente la modificación del Plan General Metropolitano (MPGM) para proteger el casco antiguo del barrio de Sant Andreu de la capital catalana
El objetivo es garantizar la conservación, rehabilitación y revitalización del casco histórico.
La aprobación de la Subcomisión de Urbanismo cierra hoy un largo proceso de planeamiento, después de que el Pleno del Ayuntamiento de Barcelona también aprobara provisionalmente esta modificación del PGM el pasado mes de febrero.
La voluntad de este cambio es garantizar la conservación, rehabilitación y revitalización del núcleo histórico del barrio barcelonés de Sant Andreu, con una superficie de 720.332 m 2 , situada entre la avenida Meridiana, el Paseo de Torras i Bages, la calle de Grado y la calle de Rovira i Virgili.
Para cumplir estos objetivos, la MPGM apuesta por el mantenimiento de las tipologías propias del barrio y de su tejido consolidado. En este sentido, prevé desafectar 268 de los 300 viviendas calificadas como viales, zona verde o equipamientos. Al mismo tiempo, propone la catalogación y protección del patrimonio con valor arquitectónico para preservar el conjunto del antiguo pueblo de San Andrés.
Por otra parte, el nuevo planeamiento consolida el techo destinado a equipamientos y prevé las reservas de suelo necesarias para futuros equipamientos en la isla de Can Fabra ya la situada entre la calle del Pont y la calle del Segre. La modificación también aumenta las zonas verdes en más de 12.000 m 2 respecto a lo que preveía originalmente el Plan general.
La modificación del PGM define para el barrio dos conjuntos protegidos, uno referido al núcleo del antiguo municipio de San Andrés y al otro, la calle Gran de Sant Andreu, para reforzar su papel como eje cívico y centro del barrio. Por esta calle se reconocen unas alineaciones de sección variable, lo que evita la afectación de numerosas parcelas y posibilita el mantenimiento de la edificación consolidada.